Museo estadounidense conmemorativo del Holocausto: Crisis en Darfur
El museo estadounidense conmemorativo del Holocausto tiene como objetivo mantener vivo el recuerdo del Holocausto y honrar a las víctimas. Una forma clave de cumplir con su misión es confrontar las amenazas de genocidio y crímenes contra la humanidad que tienen lugar en la actualidad.
Cuando Google Earth se lanzó en junio del 2005, la academia para la prevención de genocidios del museo estaba estudiando la mejor forma de que los profesionales de la política exterior pudieran compartir información sobre amenazas de genocidio y atrocidades masivas. El museo supo ver el potencial de Google Earth como herramienta para organizar y presentar información de forma atractiva y actualizada, así como para llegar al público general y concienciarlo sobre genocidios y crímenes contra la humanidad.
El proyecto de la crisis en Darfur forma parte de la iniciativa para la plasmación en mapas y la prevención de genocidios del museo estadounidense conmemorativo del Holocausto, un intento conjunto sin precedentes entre el museo y Google de arrojar luz sobre el genocidio que está teniendo lugar en Darfur a través de imágenes por satélite con capas multimedia y de datos en Google Earth. Esta colaboración atraerá la atención de los usuarios de una forma muy visual hacia las amenazas de genocidio presentes en todo el mundo, y promete transformar el modo de transmitir y presentar la información sobre atrocidades masivas en el futuro.
Durante la crisis, más de 300.000 personas fueron asesinadas y 2.500.000 se vieron obligadas a abandonar sus hogares en la región de Darfur, al oeste de Sudán. En todo Darfur, más de 1600 poblados han sido destruidos total o parcialmente. Las vidas de los desplazados todavía peligran, mientras que la violencia sigue afectando a los poblados que quedan en pie en Darfur, así como a los campos de refugiados que proliferan en toda la región y en el vecino Chad.
Generalmente, aquellos que perpetran el genocidio lo hacen bajo una nube de mentiras y negación. El Gobierno de Sudán asegura que menos de 9000 civiles han muerto en la "guerra civil" de Darfur. Es fácil desmentir estas afirmaciones si cualquier ciudadano del mundo puede ver imágenes por satélite de alta resolución y otras evidencias que antes solo estaban al alcance de un grupo limitado. Ahora, cualquier usuario de Google Earth puede acercar la imagen de Darfur y ver hasta dónde alcanza la destrucción, poblado tras poblado.
Cómo lo hicieron
El desarrollo comenzó formalmente con la fundación de una organización internacional de voluntarios, el proyecto BrightEarth. Su misión era estudiar cómo se podía usar una nueva generación de herramientas de creación de mapas, incluido Google Earth, para que los ciudadanos de todo el mundo pudieran defender a las poblaciones más vulnerables. En el proyecto participaron trabajadores del museo, así como Declan Butler, reportero científico sénior de la revista Nature Magazine; Stefan Geens, autor del blog www.ogleearth.com; y los profesionales de los sistemas de información geográfica (GIS) Mikel Maron, Timothy Caro-Bruce y Brian Timoney.
En colaboración con organismos de las Naciones Unidas, el Departamento de Estado estadounidense y organizaciones no gubernamentales, el museo consiguió datos que hasta entonces estaban disponibles solo en lugares recónditos y en diversos formatos, como mapas en papel, gráficos y texto.
El personal del museo y los voluntarios de Bright Earth trabajaron durante más de un año para recoger datos sobre la destrucción de poblados, los enclaves de los campos de refugiados o el acceso a ayuda humanitaria, y crearon el primer borrador de capas KML a principios del 2006. Era la primera vez que todos estos datos, imágenes y contenido multimedia se concentraban en el mismo lugar.
No obstante, sin imágenes de alta resolución, presentar los datos en Google Earth suponía solo una pequeña mejora con respecto a los mapas tradicionales. Google acordó priorizar la adquisición de imágenes de Darfur y, entre el otoño del 2006 y la primavera del 2007, el equipo de Google Earth actualizó grandes franjas de Darfur con imágenes de alta resolución.
Solo con imágenes resultaba casi imposible localizar los poblados atacados. Contando solo con los datos, el usuario podría ver la imagen a gran escala de los ataques en Darfur, pero no llegaría a entender el impacto local en cada poblado y en cada asentamiento. Cuando se combinaron los dos tipos de datos, ambos fueron más impactantes.
Las imágenes de restos carbonizados de los poblados, atacados uno tras otro, eran una prueba innegable del grado de destrucción y sus consecuencias: cientos de miles de tiendas en campos de refugiados por toda la región. Al unir fotografías y vídeos con referencia geográfica tomados por personal del museo y fotógrafos de prestigio internacional, así como los testimonios de Amnistía Internacional, los relatos de lo acontecido en estos poblados se hicieron más personales y conmovedores.
La crisis en Darfur es el primer intento del museo de contribuir a hacer más reales a las víctimas de un genocidio a través de Google Earth. Ahora, el museo trabaja en nuevas formas de actualizar las capas para que los supervivientes, los trabajadores de ayuda humanitaria y aquellos bajo amenaza de genocidio en Darfur y en todo el mundo puedan hacernos llegar sus historias.
“Uno de los más de 1600 poblados destruidos total o parcialmente en Darfur, con más de 100.000 hogares arrasados
”Ya no vale la excusa del desconocimiento. Esta herramienta arrojará luz sobre un oscuro rincón del planeta y ayudará a proteger a las víctimas de forma indirecta. Es David contra Goliat, y Google Earth acaba de darle a David una piedra para su honda.
”John Prendergast, International Crisis Group (Washington Post, 14 de abril del 2007)
Impacto
Cuando Google Earth acordó incluir las capas del museo como contenido predeterminado para todos los usuarios, estaba claro que este proyecto tendría un gran impacto en todo el mundo.
El proyecto de la crisis en Darfur se publicó el 10 de abril del 2007. Su lanzamiento tuvo cobertura internacional en más de 500 publicaciones en inglés, además de muchas otras en diferentes idiomas, como el árabe o el danés. Cientos de blogs se hicieron eco de la noticia. Ahora profesores, trabajadores de ayuda humanitaria y activistas utilizan Google Earth asiduamente para mostrar cómo es un genocidio. Más de un millón de personas han descargado capas adicionales del sitio web del museo y más de 100.000 han visitado la página en la que se explica cómo contribuir.
Dos meses después de su publicación, el sitio web del museo sigue recibiendo un 50 % más de tráfico que antes. El proyecto ha ampliado significativamente la cobertura global del sitio web: el porcentaje de visitantes de fuera de EE. UU. ha pasado de un 25 % a un 46 % en el último año. Además, el número de visitas solo de Sudán se ha multiplicado por diez.
Esta reacción demuestra que los internautas de todo el mundo buscan más aplicaciones tecnológicas que los conecten con lo que ocurre en el mundo de una forma más auténtica y personal. Los usuarios de Google Earth pueden seguir acercando el mapa para ver sus casas, buscar restaurantes y visitar ciudades en 3D, y ahora también pueden entender cuál es el gran potencial de tener un "planeta virtual" cuando observan por sí mismos lo que sucede en Darfur.
Los organismos de las Naciones Unidas, así como algunas organizaciones no gubernamentales, están empezando a utilizar Google Earth para organizar y compartir información crítica sobre el terreno y en sus sedes. No obstante, el uso de Google Earth como herramienta para prevenir genocidios sigue siendo limitado.
Google Earth, junto con los nuevos enfoques participativos de la Web 2.0, podría contribuir a mejorar la respuesta operativa y la alerta inmediata ofreciendo herramientas dinámicas y colaborativas para que las comunidades se reúnan, compartan información crítica y ayuden a los ciudadanos a ver el mundo desde otra perspectiva.
El rápido acceso a las imágenes por satélite permite que los usuarios de Google Earth de todo el mundo participen en la supervisión de zonas en riesgo de genocidio y refuerza la capacidad de las organizaciones para responder de forma eficaz. Un mayor uso de imágenes de zonas remotas podría ayudar a convencer a los perpetradores potenciales de que sus acciones contra los civiles no pasarán desapercibidas ante la comunidad internacional. Y, por último, estos esfuerzos podrían contribuir también a crear un registro fiable y globalmente accesible como testimonio de las responsabilidades en crímenes contra la humanidad, genocidios y otras atrocidades.
“Niños de Darfur
”